sábado, marzo 18, 2017

Andrés Reynaldo: Osmani y Gente de Zona, el escenario es de Raúl, pero por qué cantan allí


  Información  relacionada:

En Miami se producen protestan porque el dúo Gente de Zona salió bailando en un video con el nieto-escolta de Raúl Castro en La Habana. Surge la propuesta de retirarle a Gente de Zona las llaves de la Ciudad de Miami concedidas por una enfática y a todas luces irresponsable recomendación de Univisión. Luego, el reguetonero Osmani García protesta por semejante “cacería de brujas” en sucesivos videos que provocan la furia del exilio
 ********************
Osmani y Gente de Zona, el escenario es de Raúl, pero por qué cantan allí

Por Andrés Reynaldo
Marzo 16, 2017


Randy Malcom y Alexander Delgado, de Gente de Zona, reciben las Llaves de la Ciudad de Miami. Giorgio Viera The Miami Herald

Muchas fuentes antiguas y modernas, por intenciones poéticas o científicas (en caso de que ambas no sean lo mismo), hablan de cómo el vuelo de una mariposa genera acontecimientos imprevisibles en la distancia y el tiempo.

Tomemos, por ejemplo, los acontecimientos desatados en Miami a partir de que el nieto-escolta de Raúl Castro subiera al escenario de Gente de Zona en La Habana. Primero, surge la propuesta de retirarle a Gente de Zona las llaves de la Ciudad de Miami concedidas por una enfática y a todas luces irresponsable recomendación de Univisión. Luego, el reguetonero Osmani García protesta por semejante “cacería de brujas” en sucesivos videos que provocan la furia del exilio. Este tipo de catarsis acaba por revelar un escándalo de la conciencia nacional.

Raúl y el castrismo en fase anexionista 

Soez y beodo, Osmani nos ofreció en esos videos un valioso documento político y antropológico. La palpitante muestra transversal de un importante sector de la sociedad cubana de hoy que concilia, sin pestañear, la gozadera con la servidumbre. Cierto que nadie puede decirle al nieto de Raúl que se baje del escenario. Se entiende. En resumidas, el escenario es de Raúl. La cosa va por otro lado. ¿Qué haces tú cantando y bailando, qué haces tú disfrutando de una tramitada fama en el escenario de Raúl? ¿Cómo te las arreglas tú para que Raúl te permita cantar en su escenario?

(Osmani García. actuando. Foto de archivo)

Esa es la pregunta que eluden, bien con aires de víctima, bien de matón, los artistas y escritores que vienen y van de Cuba. Sea un reguetonero analfabeto o una novelista de moda. Y esa es la pregunta que no podemos dejar de hacer, porque en esto nos jugamos, por lo menos, nuestra identidad de exiliados. Una regla del arte del espionaje reza que todo servicio controla, o acaba por controlar, aquello que le conviene. Acúsenme, si quieren, de paranoico. Pero yo lo que veo es el operativo constante, certero y solvente de ridiculizarnos ante el mundo, inhibirnos de la memoria y limitar nuestra acción. En fin, que poco a poco nos van tomando la plaza. Pieza por pieza, me están montando en el jardín el escenario de Raúl.

El reguetonero cubano Osmani García entra en un programa de rehabilitación

Si abres los ojos, no puedes dejar de verlos. Si escuchas, no puedes dejar de alarmarte. Como masa, este sector está erosionando el perfil sociológico de las grandes concentraciones de exiliados en la Florida y Nueva Jersey. La leyenda de una comunidad forjada en el trabajo duro y honesto, cohesionada en su odio a la dictadura (no hay pecado en odiar a las dictaduras) y capaz de asimilarse con rapidez a un estado de civilización superior, pierde terreno frente a la avalancha ignorante y agresiva que llega con todas las instrucciones para ordeñar al sistema de bienestar social y una noción de la convivencia civil degradada por seis décadas de opresión, miseria y doblez. Como elite, este sector apunta a crear una poderosa comunidad alternativa en los negocios, los medios, la academia, el arte y la política que dispute el tradicional papel del exilio como santuario de la disidencia, guardián de la memoria histórica y libre interlocutor de los asuntos cubanos ante la opinión pública.

Acúsenme, si quieren. Pero esto es lo que veo y esto es lo que escucho. El embate de una Cuba parásita, violenta, falsificada y desvertebrada que los Castro han catapultado contra Miami como se catapultaba la carroña por encima de los muros de las ciudadelas medievales para provocar la peste y, qué duda cabe, el pánico.

Por mí, quítales las llaves.
Por mí, ciérrales la puerta.

Twitter: @AndresReynaldo1

*************
 Tomado de https://www.facebook.com

Del Muro de Zoé Valdés.....

Todo esto es verdad, conosco a alguien que conoce a alguien, y casualmente hace apenas unos dias me conto lo aqui escrito.. Los tienen apadrinados, luz verde para todo, incluso me dijo que la casa del tal Randy tiene piscina y la de Alexander no, entonces este tipo (al que nadie quiere mentar), le mando a hacer una piscina a el tambien, hasta dio una orden directa a toda la policia de la habana para que los dejen circular sin chapa.. La historia es larga.. Estan metidos hasta el cuello con el castrismo y todavia hay pelandrujos que celebran este tal "poder de influencia" en cuba...











 Raúl Guillermo Rodríguez Castro ¨El Cangrejo¨ , nieto y gurdaespalda de su abuelo el tirano Raúl Castro Ruz,  en la pista  y con tremenda ¨guara¨  con  Gente de Zona bailando la ¿canción? ¨El Animal¨. Notemos que Gente de Zona son los que se acercan a reirle la gracia al Cangrejo bailador.



Nieto de Raúl castro se despelota con la Charanga Habanera..



Hitler se entera que Osmany García se fumó un cocuyo (¨un pito de marihuana¨ en Cuba o ¨porro¨ en España)


Etiquetas: , , , , , , , , , , , , , , , ,