martes, octubre 08, 2013

Alberto Luzárraga sobre Cuba: Padre Revolucionario, Hijo Millonario Nieto 'Empresario'

Tomado de http://www.futurodecuba.org/padre_revolucionario.htm


Padre Revolucionario, Hijo Millonario
Nieto 'Empresario'
 

Por: Alberto Luzárraga

El viejo refrán medieval nos decía padre labrador, hijo caballero y nieto pordiosero. Solo que se trataba de una primera generación de trabajo honrado seguida de otra de posición social que acarreaba deberes, y una tercera que mostraba las consecuencias del derroche.

En Cuba se cambian los términos en tanto que la fortuna inicial fue producto del robo, la segunda generación disfruta de él, y la tercera aspira a disimular el origen de su riqueza.

Es un hecho con consecuencias futuras que hay que enfrentar. Cuando se seque la ubre venezolana hay un solo recurso, la vuelta al capitalismo empresarial. Hoy disfrutan de capitalismo feudal. Si te portas bien te ponemos al frente de una empresa para que te enriquezcas. Y si eres de los de verdad 'buenos' hasta te conectamos con un socio extranjero que te blanquee el dinero y te abra puertas en su país, bien sea en negocios, educación para tus hijos, contactos.

Pero el diseño se complica si Cuba se abre y se democratiza. Empiezan a molestar las investigaciones sobre el origen de los fondos, los pleitos que involucren a los socios extranjeros, los sindicatos que reclamen.

Pues entonces, se dicen los 'bondadosos' abuelos y papás: se nos estropearía el negocio y la 'herencia' de los muchachos.

Hay que tomar providencias.
Primero: Dar apariencias de democratización. Asamblea Popular al capitolio. Autorizar salidas. Empezar a crear una oposición controlada. Mezclemos nuestros adeptos con los opositores sinceros. Eso creará confusión, nuestra especialidad.
Segundo: Autorizar, cuando sea el momento, partidos políticos que controlemos. El PRI lo hizo por décadas, por qué no nosotros? Son necesarios para dar argumentos a los que trabajan por el levantamiento del embargo.
Tercero: Autorizar nuevas sociedades con extranjeros colocando a los muchachos de gerentes.
Cuarto: Meter a algunos exiliados en el negocio. Sus nietos y nuestros nietos pueden funcionar y a los nuestros saben que cuentan un 'poder especial de negociación' si hubiera problemas.
Quinto: Darle, como dicen ellos, 'sweetheart deals' a algún que otro americano simpatizante para que defendiendo lo suyo defienda lo nuestro.

Nos hablan de modelo chino. ¡Inocentes! Este es el modelo criollo de siempre. Solo que ya no es el que criticaba Carlos Loveira nuestro compañero de partido al comienzo de la república. No Carlos, ya no se trata de Generales y Doctores como titulaste tu novela, ahora son Generales y Millonarios. Nunca entendiste que Marx habló mucho bagazo de caña pero dijo una gran verdad: La estructura política refleja la económica y nos vamos a asegurar de que así sea.

Moraleja: Mientras exista o se desarrolle esa piña olvidarse de comparaciones con Polonia o China. Lo mas parecido es Rusia solo que allí lo hicieron después y observando se aprende a anticipar. Eso han hecho.

Pero también nosotros hemos aprendido algo y contamos con muchos mas muchachos preparados que son jueces, ejecutivos, profesionales de muchas carreras, científicos, empresarios, senadores, congresistas, profesores, alcaldes.

Y además sobre ese asunto de inversiones, como hacerlas funcionar, y crear empleo sabemos mucho mas que ustedes. No es lo mismo criar la vaca que ordeñarla y por eso no tienen ustedes ni idea de lo mucho que hay que hacer y el costo de poner a Cuba en posición competitiva en un mundo muy difícil.

Dar esperanza y trabajo digno a 11 millones de cubanos no se hace con maniobras que involucren a unos pocos. Destrozar y extorsionar es fácil, construir es difícil y hay que tener vocación, experiencia práctica, acceso a fuentes continuas de capital y buenas ideas. De todo eso carecen ustedes y abundamos nosotros.

Hay mas capítulos por escribir en esta larga novela que se llama Cuba y el Castrismo. El capítulo final se titula: ¡Se acabó el cuento!